Moda Sustentable

Lucila Iotti, diseño vanguardista con terminación artesanal

La marca Lucila Iotti ha sabido conquistar a los más importantes trendsetters a nivel internacional. Del barrio de Palermo al mundo, Lucila Iotti se presenta en la Expo CAIPIC 2015. Cuando una persona le pone su nombre a su empresa, es porque siente orgullo por lo hecho. Conocé esta interesante historia.

Las influencias en la confección artesanal de Lucila se remontan a 1920, año en que su abuelo Jorge Iotti abrió su primera sastrería. En la década del ‘40, el padre de Lucila decidió sumarse al proyecto redoblando la apuesta: establecerse con su primer comercio a la calle. Hasta los ‘90 supieron marcar tendencia temporada a temporada en la legendaria Casa Iotti de la avenida Callao, de Buenos Aires.

Este legado nos ayuda a comprender el porqué del éxito que su hija, Lucila Iotti, ha sabido cosechar en tan poco tiempo. Desde 2007 ofrece al mercado sus zapatos de alta gama. Esta influencia familiar, sumada a su pasión por los zapatos, han dado rienda suelta a la creatividad en los diseños y colores, lo que distingue a sus modelos dentro y fuera del país.

¿Cómo fueron los inicios de la marca?

En mayo de 2007 abrimos nuestras puertas como Lucila Iotti, en un pequeño local en el barrio de Palermo. Rápidamente los diseños captaron la atención de numerosos referentes de la moda y el espectáculo, que difundieron la marca de boca en boca; y tanto los periodistas especializados como las estilistas de moda elogiaron la originalidad. La marca comenzó a estar presente en producciones de las revistas del segmento y así comenzó a ganar público, visibilidad y prestigio.

¿Qué clase de zapatos realizás actualmente? ¿Qué distingue tus colecciones?

En Lucila Iotti fabricamos zapatos de alta gama que se destacan por la originalidad de sus diseños, el uso del color y la innovación en los materiales. Respondemos a la búsqueda de calzado de estilo único y somos una de las pocas marcas de calzado argentino con diseño original (por sobre la preponderancia de la copia contra temporada de las grandes marcas del mercado). Están realizados con materiales nobles, originales y elegantes. La idea central a transmitir es que a través del diseño original, se completa el estilo personal de cada mujer.

¿Cuándo comenzaste a ver el crecimiento?

Los resultados fueron sorpresivos. Las ventas fueron en aumento y utilicé la ganancia de cada temporada para reinvertir en la colección siguiente. La producción obtuvo el reconocimiento de importantes trendsetters como Patricia Field (vestuarista de Sex & the City), de las galerías Le Bon Marché, en París, donde los zapatos estuvieron a la venta en 2008 en la muestra de diseño “Exposition París-Buenos Aires”, asimismo la conocida web de moda norteamericana The Cool Hunter, solicitó y reseñó mis productos.

¿Han enfrentado dificultades en estos ocho años? ¿Dónde se apoyan para sortearlos?

Sí, claro. La principal dificultad que enfrentó la marca estuvo relacionada con la producción: la imposibilidad de los talleres para cumplir con los tiempos de producción necesarios para optimizar las ventas a nivel local, y por otro lado, la calidad insuficiente para las exigencias de las empresas que solicitaron los productos en el exterior. Ahora estamos en camino de revertir esto.
El apoyo del Ministerio de Industria fue y es muy importante para la marca. Significó adquirir mediante el programa Expertos PyME mayores conocimientos sobre la gestión empresarial y por sobre todo, nos da la sensación de ser parte de un Proyecto Nacional que busca recuperar nuestras industrias. En ese camino, en Lucila Iotti perseguimos una mayor calidad en la producción que nos permite insertarnos en el mercado internacional. Desde mis comienzos hasta la actualidad sigo en contacto con el INTI, donde busco asesoramiento para mejorar los procesos productivos artesanales y adecuarlos al tipo de calzado que diseño.

¿Qué proyectos imaginás a futuro?

Proyectos en relación a nuestro valor agregado, que es el diseño original. Es la fortaleza máxima de mi marca, lo que la distingue: el uso intensivo del color, la mezcla de texturas, el uso de materiales no convencionales y la combinación de la geometría aplicada como morfología en los productos. Por eso estoy en la búsqueda de fortalecer otros aspectos del negocio: satisfacer la demanda de calzado más cómodo y para un uso cotidiano dentro del país. Y en el plano internacional, se generó un interés por la marca y eso me despertó la inquietud de convertirme en la primera marca argentina de zapatos de diseño en exportar a países del primer mundo. Es un gran desafío, sería un orgullo representar a mi país desde el diseño original.

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